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Durante este periodo de balance, ha sido necesario dar respuesta a los nuevos retos de salud que plantea la sociedad. Las limitaciones estructurales del Complejo Hospitalario han obligado a supeditar el incremento de la cartera de servicios a la puesta en marcha del Hospital General, lo que no ha impedido sin embargo adelantar la progresiva incorporación de determinadas prestaciones de las que carecía el centro sanitario.
Así, cabe destacar la creación de la especialidad de NEUROCIRUGÍA, en el año 2004, como avanzadilla del completo desarrollo de este servicio quirúrgico, cuya actividad desde entonces ha evitado la derivación de un buen número de pacientes a otros hospitales de nuestra Comunidad Autónoma.
Anteriormente, a principios de 2004, entró en funcionamiento la Unidad de Tratamiento del Tabaquismo para atender a los pacientes con esta adicción desde una perspectiva especializada que abarca desde la terapia farmacológica a la psicológica, con un balance espectacular en cuanto a porcentaje de deshabituación conseguido en el primer año de actividad en el Hospital del Carmen.
Apenas un año después de que Castilla-La Mancha asumiera las competencias en la gestión sanitaria, el Complejo Hospitalario de Ciudad Real incorporó a su cartera de servicios una UNIDAD DE RESONANCIA MAGNÉTICA NUCLEAR, ubicada en un edificio de nueva construcción frente a la puerta principal del Hospital de Alarcos, en la que el Servicio de Salud de Castilla-La Mancha (SESCAM) invirtió más de 1.300.000 euros para incrementar la capacidad diagnóstica del centro sanitario mediante la puesta en marcha de un equipo de altas prestaciones tecnológicas.
Paralelamente, comenzó su actividad en 2004 la UNIDAD DE GESTIÓN DE RIESGOS CLÍNICOS, encargada de identificar, evaluar y establecer los mecanismos de control necesarios que permitan anticiparse a los errores y peligros que afronta la actividad sanitaria para disminuir así su aparición y mitigar sus consecuencias. 
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